Como Limpiar Tus Gemas, Piedras y Cristales
- Por Jose Manuel
- 3 dic 2024
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 30 oct

Todo lo que existe, independientemente de si es un ser vivo o “inerte” cuenta con una vibración. Eso significa que todo, absolutamente todo en el mundo, tiene vida. Una planta, una persona, un trozo de madera, una joya, una piedra, un metal, sea lo que sea, si prestamos suficiente atención vamos a percibir alguna muestra de su cuerpo energético. Asimismo, la energía puede vibrar alto, bajo o contaminarse, entendiendo por contaminación, el proceso en el cual un cuerpo es influenciado por otro, que le impide mantenerse en su estado más armónico posible.
En ese orden de ideas, una duda muy frecuente que se suscita al respecto es, llegado el caso, cómo limpio la energía de un objeto. Ya hemos hablado en un artículo anterior sobre algunos métodos generales de limpieza energética. En esta ocasión vamos a centrarnos en un área específica, que son las gemas, piedras y cristales.
Cuando a nuestra vida llega por primera vez una piedra o un cristal, independientemente del camino que haya tenido que recorrer para estar con nosotros, siempre es muy aconsejable que lo limpiemos, ya que, a partir de ese momento va a acompañarnos constantemente y a desempeñar algún tipo de función para nosotros. Como no sabemos que camino es el que ha tenido que transitar, lo mejor es que surta un proceso que asegure que vibre en su estado más puro. A continuación, te voy a señalar los métodos más comunes y por su puesto accesibles para que armonices la frecuencia de estas maravillosas herramientas mágicas.
Sal Marina
Los granos de sal marina son la forma mas accesible de limpiar nuestros cristales, ya que, este complemento alimentario casi siempre estará presente en nuestra cocina, eso sí, asegúrate que sea sal marina natural. Para llevar a cabo este método de limpieza, solo tendremos que extender sobre un plato, preferiblemente blanco, una capa generosa de sal y descansar sobre ella todas nuestras piedras. Déjalas así por un tiempo aproximado de mínimo 2 horas, si puedes dejarlos un día completo mucho mejor. Algunas personas acostumbran también a hacer una mezcla de agua y sal y verter allí los cristales. También es un modo mu eficiente de limpieza, sin embargo, ten en cuenta que algunas piedras se disuelven al entrar en contacto con el agua, en ese caso lo mejor es utilizar el método de la sal en seco.
Humo de Incienso
Este es, creo yo, el método favorito de muchos porque es un procedimiento muy rápido. Solo tendrás que encender un incienso natural por su puesto y pasar tu cristal por el humo que desprende. Puedes utilizar inciensos elaborados a base de ruda, canela, eucalipto, laurel, rosa, cedrón o una planta que tenga dentro de sus propiedades la capacidad de limpiar. También puedes usar atados de hierbas de salvia o romero, maderas sagradas como el palo santo o el sándalo y resinas naturales como el olíbano y la mirra.
Tierra
La tierra tiene una alta capacidad limpiadora porque funciona como un agente conductor entre el cristal y la naturaleza que facilita el proceso de armonización energética. Simplemente tendrás que enterrar tus cristales en tierra, ya sea de una maceta o en la naturaleza misma, y, dejarlos allí por un periodo mínimo de 24 horas. Algo que hay que tener en cuenta aquí, es que la tierra que vayamos a utilizar cuente con naturaleza viva y sana. No olvides de marcar el lugar donde los entierres. Es posible que en el transcurso de este proceso algún elemental o espíritu de la naturaleza se sienta atraído por tus piedras y las tome “prestadas”, me ha pasado. Cuando ocurre esto, la entidad suele dejar algo a cambio o retribuirnos posteriormente con algún tipo de ofrenda. En cualquier caso, es una bonita forma de conectar con estos seres.
Agua en Movimiento
Si cuentas con la fortuna de tener cerca un arroyo o manantial por donde circula agua cristalina, este también es un excelente lugar para limpiar tus cristales. Sumerge la piedra o cristal durante unos minutos y listo, tu cristal se siente como nuevo. La recomendación aquí es conocer las características físicas de tu gema porque algunos de ellos son solubles en agua. Si no estas seguro que su composición química es resistente a los líquidos, mejor no te arriesgues.
Luz del sol o la Luna
La luz del sol o la luna son una excelente alternativa, ya que estas luminarias son capaces de despertar y potenciar las cualidades benéficas de nuestras piedras. Si optas por el sol, escoge un día radiante, antes del medio día y expón tu cristal a la luz directa por una hora aproximadamente. Si en cambio, vas a utilizar la luz de la luna, verifica que se encuentre en una fase apropiada, en mi caso, recomiendo el día en que se perfecciona la luna llena. Deja tus piedras y cristales expuestos a la luz de la luna por un tiempo mínimo de 2 horas, si los puedes dejar toda la noche, mucho mejor.
Los anteriores son métodos naturales y sencillos que se encuentran al alcance de todos. Existen otros métodos, pero no los he mencionado por que tendrías que adquirir herramientas específicas a las que no se tiene acceso siempre y que además pueden incluir un valor económico representativo. La idea es facilitarte el camino para que puedas acercarte a este mundo de bienestar energético.
Es frecuente que luego de conocer los métodos de limpieza, nos preguntemos ¿Cada cuanto debo limpiar mis cristales? Si es un cristal que adquieres por primera vez, la respuesta es siempre. Ahora, si es un cristal que ya lleva tiempo contigo y nunca lo has limpiado, límpialo de inmediato. Después de la primera limpieza, lo recomendable es que repitamos el proceso cada 3 meses aproximadamente. Si sientes que está expuesto a un entorno bastante contaminado energéticamente, el tiempo variará entre un mes y una semana respectivamente.
También te puede interesar: Guía Básica de Cristales Mágicos










